De Vuelta:



Tras unas semanas sin pasarme por aquí, he de reconocer que me ha venido muy bien y lo necesitaba, las redes sociales terminan cansando mentalmente, así que, aproveché el momento de tener problemillas con la compañía de teléfono y el ajetreo que llevamos Fabio y yo con nuestro nuevo proyecto de vida para parar un poco la mente y dejarme llevar. A veces, no nos damos cuenta de la negatividad que absorbemos constantemente en las redes e internet y en la maldad que las personas son capaces de transmitir a través de ella, tampoco el hecho de que las notificaciones del teléfono no dejan de sonar e interrumpir nuestros quehaceres y momentos de paz, poniéndonos en tensión o perdiendo los nervios. Me he sentido realmente aliviada durante estos días porque, ni me he muerto ni me ha pasado nada raro por estar sin internet, es cuestión de conciencia. 

Como veis, hay una buena razón. Más adelante os contaré cuál es ese proyecto tan importante, más o menos, lo podré decir en octubre cuando esté todo listo, ¿os imagináis qué puede ser? Tenemos que planificar muchas cosas y no puedo estar más ilusionada, además, he podido ver algo durante todos estos días y es que por fin he dejado el pasado atrás, justo donde tiene que estar, tratando de vivir el aquí y ahora. Con anterioridad, me costaba mucho dejar las situaciones pasadas en su sitio, me empeñaba en que las cosas importaban y debían recordarse pero lo único que te aporta es un círculo vicioso de negatividad que de nada necesitas, por lo que, estos días también me he dedicado a la limpieza interior, por así decirlo. 

Siento haberme ido tan de repente pero nunca se calculan estas cosas. He podido darme la oportunidad de relajarme, leer dos libros muy interesantes que pronto os recomendaré por aquí, ir zanjando temas pendientes y aprendiendo que la paciencia es lo mejor que uno puede tener en su vida, con un poco de espera, todo llega. También he pasado momentos de estrés por algunas cosas pero siempre trato de focalizar mis energías en algo que realmente valga la pena, aliándome a una fiel compañera: la serenidad. En muchas ocasiones, nos enfadamos por todo y no nos damos cuenta de que no es bueno para nosotros, nos aleja de nuestro centro y de lo que verdaderamente importa. 

Fabio y yo hemos podido compartir más momentos juntos, ya sabéis que, a veces, el trabajo puede interferir un poco en el tiempo libre. Varios planes para nosotros han podido materializarse tal y como habíamos pensado, siempre sin mirar atrás, con la mirada al frente pero, tenía muchas ganas de estar de vuelta, los blogs nunca quedarán atrás, permanecerán en todos y cada uno de mis presentes o, al menos, eso espero. También compartí muchos momentos con mi familia, fue un fin de semana increíble en el que hablamos de muchas cosas, casi colapso de todo lo que teníamos pendiente de comentar. Como siempre, cosas pendientes y momentos que disfrutar... 

Quizá no esté tan activa como antes por la organización de este proyecto pero, voy a estar publicando el mismo contenido que estaba compartiendo con vosotros, puede que mañana tengáis un relato nuevo o puede que pasado mañana... Ya lo iremos viendo. Me alegro mucho de estar de vuelta.


Espero que os haya gustado esta entrada y que os alegre de que haya vuelto por aquí. Un beso y un abrazo, lectores.


Podéis visitar y seguirme en Instagram, cada día tenéis actualizaciones sobre mi día a día y fotos nuevas: 

También, podéis seguir la página de Facebook del blog: 

Por último, seguidme en Twitter: 

Comentarios

  1. I am happy to see you return, Laura. I will be here to follow your blog and your project when you launch it. Sending a hug!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Thank you, appreciate that. I missed this comment and the blog support.

      Kisses!

      Eliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Delincuencia Convencional y No Convencional:

TAG del Metalero:

Serie "El Mentalista":