Cambiar Nuestro Alrededor:

Quería compartir con vosotros algunas cosas que he aprendido para cambiar mi alrededor en esta entrada que puede que os ayuden, siempre basadas en mi experiencia, no es que tenga la verdad absoluta ni nada por el estilo, así que, disfrutad del post. La cuestión es que, al principio tenía una idea bastante errónea en la que creía que no podía cambiar a los demás por mucho que me esforzase, además de que pensaba estar en un lugar inferior a los ellos y como si no fuera capaz de revindicar mis derechos como persona. Hay muchos que piensan que deben o tienen que permanecer en una misma situación porque no pueden hacer nada o por alguna otra razón que entorpece su cambio pero no es así, si tú quieres, puedes hacerlo de verdad. No tienes que cambiar a nadie, tan solo tienes que cambiar tú para que tu alrededor también lo haga...

Una de las primeras cosas que me sirvieron para animarme a cambiar fue el trauma del que siempre os hablo (y que todavía no os cuento), no siempre tiene que haber una circunstancia de este tipo para empezar a ver las cosas de otro modo pero, en mi caso sí que fue así (lo mismo, también en el caso de otras personas). Ciertas preguntas circulaban por mi mente, no entendía muy bien qué estaba ocurriendo, todo mi cuerpo estaba sufriendo las circunstancias de todo. Algunas de las cosas más presentes que me pregunté fueron quién estuvo a mi lado en esos malos momentos, quién trataba el tema fríamente y sin ápice de delicadeza y quién me estaba tratando mal en ese presente. Evidentemente, las respuestas no me gustaron, así que, tenía que cambiar lo que estaba patas arriba, tenía que alejar lo que no era bueno para mí en aquellos momentos. ¿Y qué era lo malo? Quizá, preguntaréis... en primer lugar, las cosas que me estresaban, entre otras, la Universidad que estaba creando una presión sobre mí que ya no podía manejar, además de la relación tan tóxica que tenía con las tres personas existentes en mi vida. Tenía que tomar una decisión, ¿verdad?

Poco a poco, empecé a buscar a aquella personita que dejé atrás, el carácter enterrado en lo más hondo de mi ser para empezar los cambios que debían acontecer en mi vida, era absolutamente necesario. Al principio, me lo callaba todo, pero más adelante empecé a decir aquello que retenía, en cuanto me fui acostumbrando a decir las cosas tal como las sentía, iba sacando todo lo que llevaba dentro y notando una sensación de alivio inexplicable. Dejé la Universidad, ¡una tarea hecha para sentirme mejor! La siguiente fase era responder a esta importante pregunta: ¿quiénes eran las personas tóxicas en mi vida? Eran tres exactamente, así que, poco a poco tenía que alejarlas de mi vida para empezar a sentirme yo misma, para encontrarme y por fin, dejar toda la negatividad atrás empezando una nueva vida con lo que necesitaba realmente. El cambio de alimentación también fue muy importante porque me ayudaba a sentirme mejor conmigo misma, fueron meses y meses de cambios, a decir verdad pero, estaba dispuesta a hacerlos, los necesitaba y quería llegar a mis objetivos de una vez por todas. Volví a mi modo de vestir casi perdido por obligación, así que, otro cambio a añadir, fue increíble ponerme toda esa ropa que siempre me había llenado y encantado, ¡no podía creérmelo del todo, pero sí! También me pregunté quiénes eran las personas que me trataban bien y me ayudaban en todo momento, eran otras tres que siempre habían estado presentes en mi vida, decidí estar con estas personas que han sido las que me han llenado y dejar atrás las que no lo han hecho y han colapsado mis días de negatividad, control y posesión.

Tras lo que os acabo de contar, os puedo decir que es muy bueno preguntaros cosas, intentar responderos... es importante hablar con vosotros mismos, conciliaros con lo que sea que no os guste o con los errores cometidos, el mejor aliado que vais a tener en un principio, sois vosotros. Las preguntas más importantes que creo que deberíais haceros, en caso de que estéis pasando una circunstancia muy dura o situaciones de depresión, estrés, etc. siempre intentar ver quién es el que está a tu lado y te trata bien porque que esté contigo pero te trate mal como me pasó a mí, pues no, la verdad es que ya se pueden ir a paseo. Cuando ya te hayas preguntado esto, estaría bien que contemplaras lo que no te gusta de tu alrededor y por qué, responder qué es lo que te está impidiendo ser feliz o seguir el camino que deseas. Automáticamente, cortad todo lo malo, lo que os estresa en ese momento ya sea un proyecto, una clase que os está transtornando, etc. Pregúntate quiénes son las personas tóxicas en tu vida y si realmente te están haciendo algún bien (da igual que sean familiares, sabemos que algunos son bastante cargantes y no podemos estar con ellos), así que, cortamos lazos porque os están haciendo sentir infelices, os sentís mal, no os tratan bien, lo que sea. Cuando todo esto esté claro, ya podéis ver exactamente qué hacer: Quitar de en medio a las personas tóxicas, tener muy cerca a las personas que son buenas para ti y te ayudan siempre, cortando actividades o lo que sea que os esté obstaculizando como fue para mí la Universidad y seguir adelante con tus objetivos y cumplir tus sueños.

Está claro que cada uno tiene su momento para darse cuenta de las cosas, cada persona tiene su "stop" para cambiar por completo su alrededor, cada uno decide cuándo va a hacerse realidad. Los procesos son complejos, a veces incluso, bastante largos (lo mío fue más o menos un año y pico), así que, hay que tomárselo con calma y empezar a preguntarnos cosas que es lo básico y más importante como os había comentado antes. Lo que siempre digo es que nadie puede obligarte a hacer lo que no quieras, a estudiar una cosa que no te interesa, a que permanezcas siempre a su merced, que seas una marioneta, que te traten como a una posesión más entre muchas materiales... todos tenemos capacidad de decisión, de comprender y saber con quién estamos bien, con quién no, con quién podemos comunicarnos o sentirnos cómodos y quién nos está provocando desequilibrios emocionales constantes. En casi dos años he podido transformar mi alrededor, os puedo decir, que cada uno de vosotros, también puede hacerlo con una cucharadita de calma, un pedacito de paciencia y un chorrito de voluntad por cambiar...

¿Os animáis a hacerlo? ¿Alguna vez habéis cambiado vuestro alrededor? ¿Cómo?

Espero que os haya gustado esta entrada y os haya servido de ayuda para aquellos que tengan circunstancias difíciles y no sepan qué hacer ni por dónde tirar (no es que sea la mejor en esto pero, de algo tengo idea). Un beso y un abrazo, lectores... ¡Os leo!